Hay dos días en los que nunca pienso: ayer y mañana.

miércoles, 21 de julio de 2010

Bienvenue, mon amour.

Simplemente no puedo creerlo. Tras un tiempo enamorada de este maravilloso instrumento tengo uno en casa. Y esta vez es mío, ¡sólo mío! Mis oídos se posaron sobre él en una de las audiciones del conservatorio y desde ese momento supe que debería ser mi instrumento. Mark, mi profesor, me ha dejado unos libros para que vaya estudiando un poquito y por supuesto ya lo he probado. Ahora, tengo el brazo hecho polvo. Tengo que aprender a coger bien el arco, creo que eso es lo que se me hará más difícil ya que no puedo agarrarlo flojo. Instinto quizás. De todos modos, estoy súper feliz con mi chelo.

1 comentario:

  1. ¡Un chelo! Qué pasada. Apuesto a que en poquito tiempo lo tocarás genial, há, querré verte lalalal :)

    Feliz día ^^

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